El gran propagador de la Orden de Predicadores y sucesor de santo Domingo fue Jordán de Sajonia. Nació en el año de 1190, en el castillo de Padberg, fue hijo de los condes de Eberstein.
Fue a estudiar a París, la principal ciudad universitaria de esa época. En 1219 era ya bachiller en Teología y subdiácono. Por ese tiempo conoció a Domingo de Guzmán que fue su confesor. Se despertó en Jordán, el deseo de entrar a la Orden de Predicadores, lo platicó con su amigo Enrique, al cual admiraba mucho y lo envió a platicar con el prior de París, fray Reginaldo de Orleans. A su regreso, Enrique decidió ser dominico y así los dos entraron a la orden el 12 de febrero de 1220.
Reginaldo de Orleans fue un dominico clave, a él se le apareció la Virgen para enseñarle, cómo debería ser el hábito de los predicadores. También le imprimió un signo de ascetismo a la comunidad de París. Mientras que Jordán y Enrique se adaptaban a la orden. Se le convocó para ir al primer Capítulo General de la Orden en 1220. En ese Capítulo se definió el carisma de la Orden de Predicadores. Fue nombrado lector de Sagradas Escrituras en Santiago de París.
En el Segundo Capítulo se crearon las provincias dominicas y a Jordán los nombraron primer provincial de Lombardía. En esta región a la monja contemplativa, sor Diana de Andaló con quien entabló una comunicación por medio de cartas, generando uno de los epistolarios más famosos de la vida espiritual.
En agosto de 1221 murió, en el convento de San Nicolás de Bolonia, santo Domingo y en el Tercer Capítulo General se eligió a su sucesor, que por unanimidad fue fray Jordán de Sajonia, que sería Maestro General de 1222 a 1237. En esos años propagó la orden que llegó a tener 300 conventos y unos cuatro mil religiosos. Impulsó la pastoral universitaria, varios profesores y estudiantes pidieron el hábito dominico. Por ejemplo en 1230 estuvo en Oxford, donde convenció a varios estudiantes a ser dominicos.
En 1228 por medio de un Capítulo Generalísmo se presentaron las Constituciones, que fue la base de la organización de la comunidad por varios siglos.
A fray Jordán le tocó organizar el proceso de canonización de santo Domingo, que se alcanzó en 1234. Jordán escribió Los orígenes de la Orden de Predicadores y la oración: «Sacerdote santísimo de Dios».
Jordán se propuso visitar las provincias de la orden y cuando venía de regreso de Tierra Santa su barco naufragó y murió el 13 de febrero de 1237. El papa León XII lo canonizó en 1826. Su fiesta es el 13 de de febrero.
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